Hoy revisando un poco la actualidad en algunas ediciones digitales de periódicos me han sorprendido titulares como...."¿Quiere ser feliz? Hágase sacerdote, bombero o fisioterapeuta" ... o....."Los fisioterapeutas, los más felices". Adentrandome un poco más en esta noticia he descubierto que la Universidad de Chicago ha hecho un estudio sobre los 10 trabajos que más felices nos hacen y como veis entre los tres primeros se encuentra la fisioterapia. El oro se lo llevan los sacerdotes, la plata los bomberos y el bronce nos lo llevamos los fisioterapeutas.
Soy de la opinión de que si trabajas en algo por lo que sientes admiración, ganas de aprender cada día más y es lo que te gusta, estoy segura de que con ese trabajo serás la persona más feliz, sea cual sea la profesión a la que te dediques.
Considero que la fisioterapia es una profesión que te hace feliz porque es un claro ejemplo de dar y recibir: El fisioterapeuta ayuda a la gente dándole una solución a sus dolencias, ofreciéndole una forma de prevenir sus lesiones, todo esto acompañado de cariño, profesionalidad, ética en el trabajo diario y respeto hacia sus pacientes.
A cambio, cada fisioterapeuta recibe de su paciente la satisfacción de sentir que con poco que hagan, aunque solo sea mantener una actitud de escucha y comprensión hacia sus problemas, ya pueden hacer felices a las personas que trata en su día a día. También recibe el cariño que te puede dar alguien que se siente agradecido por todo lo que has hecho por él y por haber conseguido aliviarle ese dolor que tanto le afectaba.
En mis 4 años de experiencia profesional puedo decir que el trabajo me ha dado la felicidad, ya que he tratado con personas que me necesitaban y yo a su vez las necesitaba a ellas para sentirme plena y realizada en mi trabajo. Nunca dejaré de pensar que los fisioterapeutas tenemos ese algo especial en nuestro interior que nos hace que cubramos perfectamente ese molde que cada paciente requiere y como me dijo en su momento uno de mis profesores de la carrera..."Siempre que entreis en vuestro centro de trabajo, vuestros problemas se quedan de puertas para fuera, porque dentro seguro que habrá personas con problemas mucho peores que los vuestros y debeis comprenderlos y sobre todo ayudarlos"
Así que comparto completamente lo que nos muestra este estudio tan interesante.
Os lo dice una fisioterapeuta FELIZ.
¡Hasta la próxima entrada!